Usualmente cuando se trata de «turistiar», se piensa en museos, monumentos, historia, etc. Pero el deporte y los establecimientos deportivos como estadios se dejan en último lugar.

Actualmente, el deporte ha cobrado gran importancia a nivel mundial, principalmente el football que ha ganado muchos adeptos al pasar de los años.

Personalmente no soy la más experta en football, pero me gusta ver partidos y los últimos años le he sacado mucho gusto a estos. Particularmente no soy hincha de equipos locales de mi país, solo apoyo a la Selección Colombia y a un equipo europeo, pero si que me gusta ver juegos y seguir campeonatos (aunque no todos y no siempre).

Me gusta conocer estadios de otros países, pues considero que es otra forma de conocer una cultura, la historia deportiva de una ciudad o país y las costumbres de su gente.

He visitado solo 3 estadios: El Maracaná en Río de Janeiro, el Estadio Azteca en Ciudad de México y por su puesto el del equipo del cual soy hincha, el Santiago Bernabeu, que todos saben que está en Madrid. Y sueño con conocer muchos otros estadios del mundo.

Estadio Maracaná, Río de Janeiro, Brasil

Este estadio lo conocí hace varios años, en un viaje universitario a Brasil. En ese entonces no conocía ningún otro estadio excepto un par de los de mi país, por lo que no imaginaba la magnitud de este lugar.

Al entrar, nos encontramos todo un pequeño museo con la historia del estadio y de los principales equipos y futbolistas del país, narrada con fotos y sobre todo, la historia de la figura de football de todos los tiempos, aún considerado el mejor jugador de la historia de Brasil y del mundo, Pelé.

Después de recorrer la tienda y conocer la historia del estadio fuimos a ver el partido. Que sorpresa encontrarse esa inmensidad de cancha y de graderías, me dejaron con la boca abierta de lo sorprendente. Fue entonces que uno de nuestros acompañantes que era brasilero, nos dijo que por muchos años fue el estadio más grande de Brasil y del mundo.

Acerca del partido, no puedo decir que emocionante pues no sabía mucho de football y no conocía los equipos, pero de todas formas lo disfruté. Aunque admito que me elevé varias veces observando cada detalle del estadio y de su organización. Sin embargo si celebré goles, de ambos equipos, aunque discretamente, pues al comenzar el partido, nos advirtieron que no gritáramos mucho por ningún equipo pues no sabíamos en las graderías de qué equipo estábamos y no sabíamos como podría reaccionar la gente. Bueno, es común que haya rivalidades de equipos, eso en todo el mundo las hay.

Fue una gran experiencia conocer este estadio y su historia.

La cancha

Estadio Azteca, Ciudad de México, México.

Conocer este estadio, fue parte de un tour, que incluía varios lugares de la ciudad. El turibús en el DF es una gran oferta para hacer tours por la ciudad y a ciudades cercanas. Hay muchas opciones de tours, para todos los gustos y se compran y se abordan principalmente en frente del Auditorio Nacional o en el Centro Histórico.

Volviendo al tema, entrar a este estadio es increible, si el Maracaná me pareció grande, este mucho más. No en vano es el segundo más grande del mundo. Esta vez no hubo partido, pero pude recorrer todo el estadio, entrar a los vestiers, pasar por el túnel por donde entran los jugadores, cuyo piso tiene autógrafos de los jugadores más famosos del mundo y sus paredes, los datos de los equipos que han jugado en ese estadio. Claro, me emocionó ver equipos de mi país en esa pared, amor patrio. También estuve en la sala de prensa, y por supuesto en la cancha. Por cierto, recalcan mucho no pisar el césped, es sagrado su cuidado, pero dejan tomar fotos por todos lados.

Ver ese estadio desde la cancha lo hace sentir a uno minúsculo ante semejante gigante. Aparte es de los pocos del mundo con tanta tecnología, de hecho tiene una de las cámaras más potentes del mundo en las canchas.

Me dió gusto conocer este lugar, el hogar del América de México, organizado, amplio y con sus muchas historias.

La historia del hincha

Entre las muchas historias, me causó gracia la del hincha, una escultura en bronce que se encuentra en una de las graderías. La historia es que el equipo (América) realizó un concurso hace muchos años en el que escogieron al hincha más hincha del equipo. EL ganador, llevó todos los boletos de los partidos que ha jugado el América de México. Cuentan que los tenía organizados incluso cronologicamente, y evidenció que no se había perdido ningún partido del equipo. Su premio era, aparte del monumento en bronce, entradas gratis vitalicias al estadio y, de él fallecer, estas entradas al ser vitalicias puede heredarlas a sus hijos y nietos.

EL hincha – ganador de concurso – Estadio Azteca

Estadio Santiago Bernabeu, Madrid, España

Sin duda alguna ha sido una de las mejores experiencias de mi vida, no solo haber estado en el estadio, sino haber tenido la oportunidad de estar en un partido del Real Madrid, el equipo que sigo y apoyo.

La entrada al partido, fue casualidad. Esto debido a que llegamos con el.objetivo de hacer el tour por el estadio, de hecho, lo habíamos comprado con anticipación por internet.

Pero cuando llegamos nos dijeron que como había partido, no habría tour. Sin embargo, nos permitieron realizar el tour otro día. Fue entonces que al ver el ambiente tan bueno y animado que había en las afueras del estadio, fuimos a taquilla y compramos boletos en la mejor ubicación. Pobres tarjetas de crédito, pero fue la mejor inversión y no queríamos dejar pasar la oportunidad.

La emoción fue inmensa desde que entramos hasta que salimos. Confieso que todo el tiempo se me puso la piel de gallina de la emoción y tenía una cara de felicidad que no podía con ella. La organización impecable, sin tumultos, sin demoras, todo ágil y tranquilo. Incluso la salida me asombró, pues el partido terminó y a los 5 minutos ya estaba vacío el estadio sin ningún contratiempo.

El partido

El partido fue contra el Leganés, y el Real ganó 3-0. Por lo cual mi felicidad fue mucha y por supuesto la celebración de los goles genial. El ambiente increíble, asombroso. La energía de la hinchada hizo el ambiente más emocionante. Y ver a tus jugadores favoritos de cerca, no tiene precio. Incluso sentir emoción al ver a James Rodríguez, aunque haya sido solo un ratico en el segundo tiempo (para variar), pero alegra ver a un compatriota en la cancha.

Cada euro invertido en este partido valió la pena.

El tour

Días después volvimos al estadio a hacer el tour. Entramos a los camerinos, los baños, la cancha que por cierto tampoco la dejan ni tocar, y su mantenimiento es con aparatos de alta tecnología para mantener el césped en el mejor estado. También conocimos la sala de prensa, la tienda y el gran museo con toda la historia del estadio, desde las escrituras hasta la primera indumentaria deportiva del Real, hasta la actual, pasando por todos sus trofeos y reseñas, características y rendimiento de todos los jugadores que ha tenido el equipo a lo largo de la historia. Es realmente grandísimo y muy bien estructurado este museo, muy completo y detallado y lo mejor es que permiten tomar fotos y videos por todos lados. Es impresionate conocer tanta información del equipo, el estadio y de los mejores jugadores.

Sencillamente una experiencia inolvidable conocer este maravilloso lugar.

Datos:

El tour del Santiago Bernabeu lo pueden comprar por www.musement.com y/o www.viator.com.

El turibús de Ciudad de México en www.turibus.com.mx.

Y tú ¿que otros estadios conoces? Cuéntanos tus experiencias y recomiéndanos otros estadios para conocer.

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