Cali pachanguero y sabroso
Si por la quinta vas pasando es mi Cali bella que vas atravesando de norte a sur o viceversa esquivando motos.
Si vas de norte a sur, comenzarás la quinta desde el río, pasarás la loma de la cruz, el estadio Pascual Guerrero y la Plaza de Toros, terminando en el Centro Comercial Jardín Plaza.
Su gente
Cali es una ciudad acogedora, llena de gente alegre y con sabor; Gente que recibe amablemente a nacionales y extranjeros todos los días y que siempre tiene una sonrisa para ofrecer.
Dos de los muchos atractivos de esta ciudad serán mencionados en este post: La gastronomía y la vida nocturna. Ya habrán otros posts para profundizar en otros temas de la ciudad.
Gastronomía
Sin miedo a equivocarme, me atrevo a afirmar que Cali es una de las ciudades con mayor variedad gastronómica del país. Bueno de hecho todo el Valle del Cauca tiene una amplia variedad gastronómica.
Puedes saborear un delicioso sancocho de gallina como almuerzo y pasarlo con una lulada o con un champús (bebida hecha a base de maíz, con pulpa de lulo, piña y panela).
También puedes comer marranitas (bolas hechas de chicharrón envuelto en plátano verde). E incluir aborrajados (plátano maduro apanado relleno de queso y a veces de bocadillo o dulce de guayaba también), son exquisitos y adictivos.
Para endulzar el día nada mejor que un rico manjar blanco, que es un dulce de leche cuyo recipiente es la cáscara seca del fruto del totumo. También las colaciones y cocadas hacen parte de la oferta dulce de la ciudad.
En cuestión de frutas, sin duda el ícono de la ciudad es el chontaduro, una fruta originaria del pacífico colombiano que tiene un sabor que no se puede descifrar sino disfrutar, con sal o miel, según los gustos.
Por las calles de la ciudad pasan contoneándose con un platón metálico en la cabeza, las vendedoras ofreciendo ésta y otras frutas, como manga biche, mamoncillo, chirimoya, grosellas, entre otras frutas exóticas.
Otro alimento icónico de la ciudad es el Pandebono, una especie de panecillo con queso, que es delicioso, nadie se puede resistir.
No puedes dejar de probar las empanadas de El Obelisco, son de las mejores que he probado.
Y hay mucha más oferta gastronómica de la ciudad, porque si es muy diversa y deliciosa, pero es mejor conocerla, vivirla y degustarla.
Cali pachanguero
El término pachanguero se refiere a la música ruidosa, movida y pegadiza de las fiestas y rumbas.
Cali lleva ese «apellido», pachanguero, porque la vida nocturna de la ciudad es inigualable. Aparte de ser reconocida como la capital mundial de la salsa.
En esta hermosa ciudad, se forman los mejores bailarines de salsa del mundo, ganadores de muchos concursos nacionales e internacionales.
Puedes verlos en los shows de Delirio, show de salsa famoso que hasta inspiró a una película que lleva su nombre.
Además uno de los más famosos grupos de salsa del mundo nació en Cali: El Grupo Niche, grupo que suena en muchos lugares del mundo.
Si quieres vivir de cerca el folclor caleño, no puedes dejar de ir a discotecas típicas de salsa como La Topa Tolondra o Tin Tin Deo.
Otra opción son los bailaderos de Juanchito, del puente para allá, donde no solo podrás «azotar baldosa» como se dice en la ciudad al arte de bailar sino que puedes deleitarte observando como bailan los caleños y quedar con la boca abierta.
El Clima
El clima de la ciudad es caluroso como su gente, pues está ubicado en un valle, y con cañaduzales a su alrededor. Atardeceres y paisajes hermosos puedes apreciar allí.
¡Mirá vé! Cali es sabor, es alegría, es recocha (término que se refiere a diversión, ruido, alboroto) y yo soy de allá, oís.
Porque Cali es Cali, señores, lo demás es loma.
Lugave 😊
Comentarios
Que delicia ir a Cali a disfrutar todas esas maravillas, no importa en qué lugar del mundo estés, cuando escuchas la música salsa caleña no puedes evitar que se muevan tus pies y te pongas a bailar, las mujeres caleñas son reconocidas como las más lindas de Colombia ganadoras de muchos concursos de belleza.
Me dieron tantas ganas de ir a Cali.
Gracias por recordarme tantos motivos.
Gracias a tí por leerme!